¿Has puesto alguna vez la cara hacia arriba frente a la lluvia, cuando cae suavemente, en los días de primavera, en el mes de mayo, cuando se mezclan los vientos fríos del invierno y los calientes que empiezan a llegar?
Yo lo hice ayer. Cuando te fuiste. Fue agradable.
Es el absurdo de la inexactitud de todo cuanto nos rodea, el absurdo de creerlo cierto.
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